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viernes, 27 de abril de 2012

Decisión


La magia se había cumplido.
El momento había llegado.
Sentí el calor de tu piel, el brillo de tu mirada denotaba lo que sentías. Al abrazarte sentí el latir alocado de tu corazón, el mío rebozaba de felicidad.
Caminamos en silencio, con los ojos me preguntabas; “¿me querés?”. Te respondí con una sonrisa.
Tu pelo negro reflejaba mil matices a la luz del sol, ese caminar ondulante, sensual, armonioso, te daba una imagen sin igual. Cada tanto me mirabas con ese brillo tan especial y pícaro de tu mirada,
Así fuimos recorriendo la distancia que nos llevaba a casa. Al llegar entramos, vos lo hiciste con timidez, recorriendo el lugar con la mirada, tus ojos se encontraron con los míos buscando aprobación. Todo era nuevo. Mi familia se sorprendió al verte, no esperaban que te llevara a la casa, (pero ya estaba hecho) debían aceptarte, ya eras parte de mi vida y no aceptaría que fueras rechazada.
Cada quien expuso razones para evitar que te quedaras, pero estaba dispuesto a defenderte y realizar mi sueño a pesar de todos, te refugiaste apretándote a mi. Hasta llegaron a decir que eras muy grande. Tonterías.
Me costó llevarte y te quedarías, estaba decidido.
Mientras tanto permanecías pegada a mí, sabias que te protegería.
Deseaba tanto tenerte a mi lado. Hoy sos una realidad, quienes me ven pasear contigo por el barrio, se admiran de tu porte, no es para menos, tus padres fueron pastores alemanes con muchos premios ganados en tantas competencias.
Hoy estas a mi lado y sos mi orgullo.

4 comentarios:

  1. Solo quien tiene la dicha de tener un perro a su lado podrá saber el sentimiento placentero de tan leal compañía y apreciará el texto.
    Por fortuna, en casa tenemos a Rulito siempre con nosotros.
    Hermoso relato, me agradó mucho.
    Un abrazo El Moli (o ¿Luis?).

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    1. Para vos soy Luis Alberto, gracias por tu comentario, en este momento Yerry que era de mi madre me acompaña como fiel amigo que es.

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  2. De acuerdo con Arturo, sólo quienes hemos disfrutado del amor desinteresado de una mascota sabemos el orgullo que se siente al exhibir a quien nos ha elegido como su compañero de vida, porque así fue en mi caso, mi mascota me escogió a mi. Mi perrita es el ser que más adoro en este mundo, sólo comparable con el amor que siento por mis otros seres queridos.
    Gracias nuevamente por tan hermoso relato.
    Un abrazo,
    Rafael

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    1. Te cuento que este relato comenzó con otra óptica, (soy separado y vivo con mis hijas)y el humor pudo más.
      Un abrazo.

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